Cuando un niño necesita someterse a una cirugía, una de las mayores preocupaciones para los padres es la anestesia. ¿Es segura? ¿Mi hijo sufrirá efectos secundarios? ¿Cómo debo prepararlo? Estas son preguntas completamente válidas, y como anestesiólogos, es nuestro deber ofrecer claridad, confianza y acompañamiento en todo momento.
¿Es segura la anestesia en niños?
Gracias a los avances médicos y tecnológicos, la anestesia pediátrica es extremadamente segura hoy en día, especialmente cuando el procedimiento es realizado por profesionales capacitados, con experiencia y en centros que cuentan con equipos adecuados. Los riesgos graves son muy poco frecuentes, y la monitorización continua durante todo el proceso permite detectar y corregir cualquier irregularidad de inmediato.
Tipos de anestesia en pediatría
Dependiendo del tipo de cirugía y la edad del niño, se pueden utilizar diferentes enfoques anestésicos:
● Anestesia general: el niño está completamente dormido y no siente dolor.
● Sedación: se utiliza para procedimientos menos invasivos; el niño permanece relajado o dormido, pero respira por sí mismo.
● Anestesia regional o local: adormece solo una parte del cuerpo, a veces combinada con sedación para que el niño no sea consciente del procedimiento.
El tipo de anestesia se elige tras una evaluación personalizada, considerando edad, salud general, y características de la cirugía.
¿Qué deben saber y hacer los padres?
1. Ayuno preoperatorio: es fundamental que el niño no coma ni beba nada dentro del período de tiempo indicado, que varia según la edad y el tipo de alimentación que tenga. Esto reduce el riesgo de aspiración durante la anestesia.
2. Comunicar enfermedades recientes: si el niño ha tenido fiebre, tos o resfriado, es muy importante informarlo, ya que podría ser necesario posponer la cirugía debido al riesgo aumentado de complicaciones respiratorias graves.
3. Informar de sus medicamentos: cualquier tratamiento que el niño esté tomando debe ser compartido con el equipo médico.
4. Tranquilizar al niño: hablarle con palabras simples y sin generar miedo ayuda mucho. Explicarle que “los doctores lo ayudarán a dormir para que no sienta nada” suele ser suficiente para reducir su ansiedad.
El papel del anestesiólogo
El anestesiólogo pediátrico está presente antes, durante y después de la cirugía. Su función no sólo es aplicar la anestesia, sino vigilar de forma continua todas las funciones vitales del niño, ajustar medicamentos, y asegurarse de que el despertar sea seguro y sin dolor.
Confianza e información
No dudes en hacer preguntas al anestesiólogo antes de la cirugía. Explicar el proceso y resolver tus inquietudes es parte de nuestro trabajo. La transparencia y la comunicación abierta ayudan a generar un entorno de confianza y tranquilidad.
La anestesia en niños es segura, personalizada y cuidadosamente monitorizada. Como padre o madre, tu rol es preparar a tu hijo con amor, seguir las indicaciones médicas y confiar en el equipo que lo cuidará.
REFERENCIAS:
- Academia Estadounidense de Pediatría. Guías para el entorno de anestesia perioperatoria pediátrica.. Pediatría . 2021;147(5):e20210503. doi:10.1542/peds.2021-0503.
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- López-Alonso M, Sánchez M, Romera J. Manejo del ayuno preoperatorio y seguridad anestésica infantil. Un pediatra (Barc) . 2022;96(1):45‑52. doi:10.1016/j.anpedi.2021.06.010.
- Infosalus (Europa Press Salud). Anestesia en niños: por qué no es lo mismo que en adultos y cómo se garantiza hoy su seguridad. Publicado el 19 de octubre de 2025. Explica la actualización del Documento de Buenas Prácticas en el Paciente Pediátrico de la SEDAR, destacando la necesidad de equipos especializados y formación avanzada en anestesia infantil.
- NYSORA (Educational News). Dexmedetomidina en anestesia pediátrica. Publicado el 18 de septiembre de 2025. Analiza el uso creciente de la dexmedetomidina en cirugías pediátricas y los hallazgos de un estudio internacional de 18.000 casos, centrado en seguridad hemodinámica y recuperación